lunes, 5 de septiembre de 2011

Nuevo sendero:Ruta prehistórica de senderismo por la garganta del río Cacín

Vídeo en el periódico Ideal sobre la garganta del río Cacín
Vídeo en el periódico Ideal sobre el contraembalse de los Bermejales.


“Las formas de las rocas son espectaculares y nos dejaran boquiabiertos en más de una ocasión. Valga como detalle indicar que la grandiosidad del cañón no se puede apenas fotografiar: Las cámaras de fotos recogen mucho menos de lo que con la vista podemos abarcar, por lo que la realidad supera mucho a los reportajes fotográficos”, dijo.

Las  paredes del cañón se desarrollo hace entre 10.000-5000 años una población de la época de piedra. “Por ejemplo, se encontró una vasija metálica, finamente labrada y de gran calidad, denominada "Hoya de Cacín". Su importancia es tal que no está en el museo arqueológico granadino ni ningún otro andaluz, sino que se lo llevaron al Museo Arqueológico Nacional en Madrid. Es impresionante y de difícil comprensión, el cómo realizaron estos pobladores construcciones en pleno acantilado a mas de 100 metros del suelo, se supone que fue con la ayuda de troncos o cuerdas”.

Situado en la parte baja del aliviadero del embalse de los Bermejales está rodeado por una agradable extensión de pinos, encinas y otros tipos de plantas características del bosque mediterráneo. En la zona se pueden encontrar desde vestigios de antiguas civilizaciones (Dolmen megalítico), pasando por paisajes impresionantes, una estrecha y profunda garganta, por donde fluye el rio Cacín, con más de 100 metros de profundidad y 5 Km. de largo.

El valle del río Cacín esta formado por numerosos depósitos cuaternarios asociados a la dinámica fluvial del río. Entre los depósitos más destacados, cabe mencionar varios niveles de terrazas encajadas. Los materiales más abundantes están formados por conglomerados, arenas y arcillas, en función a su cercanía al lecho fluvial. Una formación de gran interés paisajístico es la gran garganta que ha formado el río a costa de excavar en los materiales más blandos.



Distancia: 4,2 kilómetros 
Altitud mínima: 721 metros, máxima: 856 metros 
Desnivel acumulado, subiendo: 129 metros, bajando: 110 metros 
Grado de dificultad: Medio


Por fín podemos disfrutar de un sendero por los tajos del río Cacín,  hasta ahora la única forma de acceder a este paisaje era en invierno con el río cortado y metidos en el agua, hasta la encerrona, pero después había que volverse pues la vegetación y el terreno hacía imposible seguir.

Este año se ha abierto un nuevo sendero a pie, que atraviesa por primera vez el cañón desde el embalse de los Bermejales hasta el Puente Romano,con una distancia aproximadamente de 4,2km que se tarda en recorrer unas 2horas a 2 horas y media. El grado de dificultad es medio, y no es accesible para perros.
Se recomienda dejar un coche en el puente romano y con otro coche ir al pantano de los Bermejales para empezar desde allí .

Por dónde empezar
Se puede empezar desde el mismo muro del embalse de los Bermejales no por abajo del muro debido a que  una tubería que lleva todos los residuos biosanitarios del pueblo esta rota y se esta vertiendo a la maleza y al río , justo por donde pasaba el antiguo sendero sin que los políticos haga nada mientras se contamina la zona pues no existe depuradora así que el sendero empieza en la parte alta  y junto al tajo dirección río abajo o empezar como hice yo la semana pasada desde el aliviadero del embalse( que por cierto han arreglado).
Salida del aliviadero

La bajada la hacemos por un carril de tierra que han hecho para bajar las piedras al aliviadero a nuestra izquierda. Entramos en un sendero que hay entre la maleza del río y cruzamos por el puente.
Puente


Luego cogemos un sendero por el lado derecho del cañón , dirección río abajo.
Sendero bien marcado

Los perros sólo pueden llegar hasta uno 800 metros más adelante, luego hay que subir una escalera vertical y pasar puentes volantes  que hará muy difícil su paso con perros.
Escalera 3 metros de alta y flexible que hace difícil su subida

Tras la subida de la escalera, tenderemos a subir hacia la parte de arriba del cañón para esquivar grandes obstáculos como piedras enormes que han caído en el cauce. Enlazaremos con un antiguo sendero de un cortijo que descendía hasta el río. Desde lo alto las vistas son preciosas.
Hay fijadas en el camino cuerdas que nos hace más fácil  el recorrido

Subiendo para arriba
Parte alta del sendero
Rocas enormes en el fondo del cañón


el sendero va junto al cañón





Una vez en lo alto, se empieza una bajada en general no muy pendiente salvo en algunos tramos en los que hay que  agarrarse a una cuerda que hay fijada a las rocas, sin dichas cuerdas el descenso sería muy difícil, el peligro está en que se suelte algún anclaje.
Bajada de una fuerte pendiente ayudándose con una cuerda que se encuentra allí.
Nos encontramos en el corazón de la garganta en la llamada Encerrona, desde aquí en el próximo kilómetro encontraremos restos de construcciones del periodo neolítico .

La encerrona  es lo que yo llamo "el corazón de la garganta "de díficil acceso, es el estrechamiento del río hasta poco más de 1 metro de anchura y donde no se hace pie, para verla hay que meterse en el río pues desde el sendero no se ve. Sólo se puede acceder con el río cortado en invierno pues en verano la corriente hace imposible acceder a ella.
Esta imagen está tomada en invierno con el río cortado, en el vídeo de abajo pueden ver como lo hice.

Imagen desde La Encerrona

En esta zona se ha encontrado restos arqueológicos del año 5000 antes de Cristo, como la Olla de Cacín  que puede verse en el museo arqueológico de Madrid.

Se dice que en un arqueólogo británico a principios del SXX encontró la llamada Olla de los tajos del río Cacín del año 5000 AC

Impresiona ver la inaccesibilidad de las construcciones y es que cuando se construyeron seguramente el  río estaría mucho mas cerca y habría sufrido menos erosión el terreno  y su acceso sería mucho más fácil.

Adentrarse por este sendero es como estar en un terreno casi virgen debido a que durante mucho tiempo el acceso ha sido muy difícil, gracias a este nuevo sendero se puede poner a disposición de más personas este maravilloso lugar.




Cavidades como estas se usaban para resguardarse en el pasado, simplemente tenían que construir un muro de piedras y barro en la parte delantera y ya tenía un refugio para resguardarse del tiempo. Pero vemos como la erosión del terreno a lo largo de miles de años ha dejado las construcciones inaccesibles , conforme el río  hacía más profundo su cauce por las crecidas.



En la parte final nos encontramos varios puentes volantes, que hay que pasar muy despacio.


Parte final del trayecto, subida por un antiguo sendero de  mulas, de buen acceso  y no muy pendiente, desde aquí cogemos un camino de tierra que nos lleva al puente romano donde hemos dejado el coche.



Lamentablemente creo que este sendero maravilloso no durará mucho abierto pues en algunas zonas han tenido que quitar muchas zarzas que seguramente para el verano que viene se cerrarán sino no pasa público constantemente que pise esa vegetación o la quite y por otro lado, si algunas de las cuerdas se rompe, o puentes se corta  no se podrá continuar por este paraje, salvo metidos por el río.

Por  eso si se cierra o no , o para las personas que no puedan acceder, os  dejo este reportaje para que disfrutéis.

Un saludo
José Enrique Moreno